Los Alarcón (del árabe الاركون [Al-Ārkūn], en castellano «La Fortaleza») son una familia cuyo origen se remonta al reinado de Alfonso VIII de Castilla y la toma de la villa de Alarcón por el ejército castellano, que siendo liderado por el capitán Fernán Martínez de Ceballos, fue recuperada de los musulmanes durante la Reconquista. El asentamiento primitivo, de origen ibérico, fue también ocupado por los romanos y visigodos. Según el cronista Gil González Dávila, los naturales de la villa decían en aquel entonces que un hijo del rey Alarico I la ganó de los romanos y que en memoria de su padre la dio el nombre de Alaricón. Luego con el tiempo perdiendo la i, quedó Alarcón.[1]
La plaza fuerte de Alarcón, era un sitio amurallado de importancia capital para los musulmanes y conquistarla era de primera instancia para los castellanos. Es así como en 1184 y después de nueve meses de asedio, la villa cae en manos castellanas a raíz de la hazaña acometida por Fernán Martínez de Ceballos.
La leyenda cuenta que tal caballero emprendió en una noche oscura la escalada de las murallas de la fortaleza apoyándose en dos dagas viscainas; las cuales fue clavando entre los intersticios de la muralla para subir por ellas. Al subir atravesó las almenas, mató a los moros centinelas y echó una escalera para que los soldados pudieran subir. Llegando a las puertas de la fortaleza las abrió y así pudo el ejército castellano tomar la fortaleza.
Según los genealogistas tanto antiguos como modernos, el personaje real existió y estuvo en la conquista de Alarcón. Descendía de la poderosa y noble casa antigua de los Ceballos. Se dice que a raíz de su acto heroico, el rey Alfonso VIII le otorgó Alarcón como apellido, pasando a llamarse don Fernán Martínez de Alarcón, que dio origen a los Alarcón. Fueron hechos señores de Valverde, Tayuelas, Vequillas y Hontecillas. Siendo también nombrados condes de Valverde. Militaron en las órdenes de Santiago y Alcántara y entroncan con casas nobles hispanas y portuguesas, entre otras con los marqueses de los Palacios.