Aquila (el Águila) es una de las 48 constelaciones listadas por Ptolomeo, mencionada también por Eudoxo de Cnidos (siglo IV a. C.) y Arato (siglo III a. C.), y actualmente una de las 88 constelaciones reconocidas por la IAU.
Ptolomeo catalogó diecinueve estrellas conjuntamente en esta constelación y en la de Antínoo, esta última surgida durante el reinado de Adriano (117-138 d. C.) y que ocupaba la parte sur de la constelación actual de Aquila hasta principios del siglo XIX, cuando fue descartada.
Altair (α Aquilae), el astro más brillante de la constelación, es una estrella blanca de tipo espectral A7Vn[1] situada a 16,8 años luz, cuya velocidad de rotación en el ecuador —aproximadamente 286 km/s—[2] es 140 veces más alta que la del Sol. Esto provoca que tenga una forma achatada perceptible —con un menor diámetro en los polos que en el ecuador—, teniendo este último menor temperatura y brillo, fenómeno que se conoce como «oscurecimiento gravitatorio».
De muy distintas características es la segunda estrella más brillante de Aquila, Tarazed (γ Aquilae), gigante luminosa naranja de tipo K3II[3] cuyo diámetro es 92 veces más grande que el del Sol.[4] Con casi seis veces la masa solar, irradia 2500 veces más energía que el Sol.[5]
Le sigue en brillo ζ Aquilae —llamada Okab—,[6] subgigante blanca de tipo A0IV-Vnn a 83 años luz de la Tierra; gira sobre sí misma a gran velocidad —en torno a 320 km/s—,[7] lo que hace que tampoco conserve su forma esférica y que esté notablemente achatada en sus polos. La cuarta estrella en cuanto a brillo es θ Aquilae, ocasionalmente conocida por su nombre chino Tseen Foo, una binaria espectroscópica con un período de 17,1 días. Las dos componentes son una subgigante y una estrella de la secuencia principal cuyo tipo espectral conjunto es B9.5.[8]
β Aquilae, que recibe el nombre de Alshain,[6] es solo la séptima estrella más brillante de Aquila; es una binaria compuesta por una subgigante amarilla de tipo G8IV[9] y una enana roja, separadas al menos 147 ua, que se encuentra a 44,7 años luz de la Tierra.[10]
δ Aquilae es otra binaria cuyo período orbital es de 3,422 años;[11] la componente principal es también una subgigante, pero de tipo F1.
31 Aquilae es también una subgigante, de tipo G7IV, con un elevado contenido metálico: su abundancia relativa de hierro es 2,40 veces mayor que en el Sol y es especialmente notable su contenido de sodio, que triplica el solar.[12]
ξ Aquilae, oficialmente llamada Libertas,[6] es una gigante amarilla con un exoplaneta. Este planeta completa una órbita cada 136,75 días y es, entre los planetas descubiertos en estrellas evolucionadas, el que posee un período orbital más corto. Su masa es de al menos 2,8 veces la masa de Júpiter.[13]
Phoenicia, nombre que recibe HD 192263,[6] es una enana naranja en torno a la cual orbita un planeta a una distancia de 0,15 ua.[14]
Igualmente se ha descubierto un planeta en órbita alrededor de Gliese 752 A,[15] enana roja a 19 años luz que forma parte de un sistema estelar binario.
Aquila tiene varias variables de interés, entre las que destaca η Aquilae, una de las cefeidas clásicas más brillantes del cielo nocturno: su magnitud oscila entre 3,48 y 4,39 en un período de 7,1766 días.[16]
U Aquilae y FF Aquilae son también cefeidas con períodos de 7,0239 y 4,4709 días respectivamente;[17][18] la primera es, además, una binaria espectroscópica.[19]
Por otra parte, R Aquilae y W Aquilae son variables Mira: la segunda es una estrella de tipo S rica en tecnecio cuyo brillo fluctúa 7 magnitudes a lo largo de un período de 490,43 días.[20]
10 Aquilae es una variable compleja catalogada como estrella Ap de oscilaciones rápidas (roAp),[21] siendo una de las más brillantes dentro de este grupo.
Otra variable de la constelación, V605 Aquilae, es la estrella central de la nebulosa planetariaAbell 50. Se encuentra en las etapas finales de su evolución estelar y se cree que hace poco experimentó el «flash de helio final», expulsando material recientemente procesado al centro de la nebulosa. Actualmente tiene tipo espectral Wolf-Rayet.[22]
En esta constelación también se encuentra ZTF J1901+1458, la enana blanca más masiva encontrada hasta la fecha (2021), con 1,35 veces la masa del Sol y un tamaño igual al de la Luna.[23][24]
En Aquila han aparecido varias novas importantes. Una de ellas, Nova Aquilae 1918, alcanzó magnitud -0,5[25] superando en brillo a todas la estrellas excepto a Sirio y a Canopo.
Aquila contiene varias nebulosas planetarias, entre las que cabe destacar NGC 6751, en la cual el viento y la radiación estelar han creado sus característicos rasgos con forma de serpentina.[26]
En su centro se encuentra una estrella de Wolf-Rayet de 140 000 K de temperatura en cuya superficie predominan helio y carbono. Se encuentra a una distancia estimada de 6500 años luz.[27]
Por el contrario, NGC 6790 es una nebulosa bastante uniforme, tanto en el espectro visible como en radiofrecuencias; su estrella central es una enana blanca con una temperatura en torno a 73 500 K y una masa equivalente a 0,6 masas solares.[28]
Una tercera nebulosa planetaria de interés es NGC 6741, conocida también como nebulosa de la Línea Fantasma, descubierta en 1882 por Edward Charles Pickering. Está en una fase de recombinación profunda que comenzó hace unos 200 años. Su estrella central tiene una temperatura de casi 170 000 K.[29]
W50 es una nebulosa y posiblemente un resto de supernova[32] en Aquila. Alberga en su interior el microcuásarSS 433. Es un objeto único en cuanto que la nebulosa interactúa con los «jets» del microcuásar, situado en su centro geométrico; tiene forma de concha esférica con dos estructuras alargadas denominadas «alas»-[33]
W44, otro resto de supernova, es uno de los pocos casos demostrados de interacción entre un resto de supernova y una nube molecular.[34]
Kesteven 75 y Kesteven 79 son otros dos restos de supernova en esta constelación. El primero de ellos alberga en su interior un púlsar que es quien proporciona energía al plerión; el estudio de la expansión de este a lo largo de 10 años ha permitido acotar la edad de este remanente a 480 ± 50 años, por lo que Kesteven 75 contiene el plerión más joven conocido en nuestra galaxia.[35] Kesteven 79 parece ser más antiguo, con una edad estimada de 8300 años.[36]
Wolf 1055 (Gliese 752), estrella binaria a 19 años luz compuesta por dos enanas rojas, una de ellas, conocida como Estrella de Van Biesbroeck, es una de las más tenues que se conocen.
W43, considerada por algunos autores como la mayor región de formación estelar de la Vía Láctea.
W49, una de las mayores regiones de formación estelar de nuestra galaxia, invisible en el óptico; W49B es una nebulosa probablemente originada por una supernova que explosionó hace más de 2900 años.
En la mitología griega el catasterismo del Águila tiene hasta cinco variantes. La primera versión nos dice que se trata del águila que raptó a Ganimedes para Zeus, quien la recompensó colocándola entre las estrellas. La consideró merecedora de tal honor, además, porque el águila es el rey de las aves y la única que puede volar directamente hacia el sol. Según un relato tardío, esta águila era originalmente un hermoso efebo llamado Aetos, que fue compañero de Zeus durante sus primeros años en Creta y posteriormente fue transformada en águila (aetos) por los celos de Hera. La segunda versión, que tiene su origen en Naxos, dice que el infante Zeus fue trasladado en secreto de Creta a Naxos y criado en la isla. Cuando alcanzó la mayoría de edad y quiso iniciar su guerra contra los Titanes, ofreció un sacrificio y apareció un águila. Zeus reconoció este hecho como un presagio favorable y colocó el águila entre las estrellas. La tercera versión nos dice que se trataba de un águila que llevó néctar al infante Zeus, quien posteriormente la recompensó colocándola en el cielo. La cuarta versión nos dice que Hermes se enamoró una vez de Afrodita, pero ella le rechazó y él se desanimó. Zeus se apiadó de él y dispuso que un águila robara la zapatilla de Afrodita mientras se bañaba en el río Aqueloo y se la llevara a Hermes a Egipto. Cuando la diosa acudió a recuperarla, Hermes cumplió su deseo y mostró su gratitud al águila colocándola en el cielo. Una quinta y última versión Zeus, persiguiendo amorosamente a Némesis, adoptó la forma de un ave, así él la perseguía como un Águila y ella escapaba como un Cisne.[37]
En el hinduismo, la constelación de Aquila se identifica con la deidad, mitad águila y mitad humana, de Garudá.
30: Águila (Ἀετός; Aquĭla): el águila que raptó a Ganimedes, o la que se mostró a Zeus cuando celebraba este un sacrificio antes de la Titanomaquia, o el águila en general por haberle tocado a Zeus en el reparto de las aves entre los dioses.
Texto latino en Google Books; facsímil electrónico.
Texto griego en Internet Archive; facsímil electrónico.