Una barrera, también llamada pluma o talanquera en algunos países,[1] es una barra que impide el paso de vehículos de manera temporal en un determinado camino o paso de manera que se pueda comprobar la identidad, o impidan el paso para evitar accidentes mientras por esa vía circula algún otro vehículo o tren.
Son principalmente instaladas en los pasos a nivel para que se detenga el tránsito de automóviles mientras el tren transita por ese tramo de su recorrido. También es común encontrar barreras en estacionamientos, peajes, túneles y puentes levadizos.
Las barreras pueden ser manuales o automáticas.
El buen funcionamiento de la barrera, así como su adecuado señalamiento, son puntos de suma importancia para evitar accidentes. Para que no sea necesaria la instalación de nuevas barreras o para eliminar las ya existentes, los trenes deben transitar a distinto nivel que los vehículos. Esto puede conseguirse mediante túneles o puentes para el tránsito vehicular, o bien haciendo que sea el tren el que circule bajo superficie (soterramiento) o por encima del nivel de la calzada.