Catolicós o catholicós (en griego antiguo: καθολικός, romanizado: katholikos, pl. καθολικοί, katholikoi, "universal") es un título usado por los obispos que encabezan cierta Iglesia oriental, llamada por este motivo catolicosado. Este título puede asimilarse al de patriarca e implicar autocefalia, aunque en algunos casos designa al primado de una Iglesia autónoma.[1] Se ha usado tradicionalmente en la Iglesia del Oriente,[2] algunas Iglesias ortodoxas orientales,[3][4] la Iglesia ortodoxa georgiana[5] y algunas Iglesias católicas orientales,[6][7] a menudo combinado con el título patriarcal.[2][5][8]
Actualmente, en la Iglesia apostólica armenia hay dos catolicós: el catolicós de todos los armenios y el catolicós de la Gran Casa de Cilicia.[3] El título de patriarca-catolicós también es usado por el patriarca de toda Georgia y el abuna que encabeza la Iglesia ortodoxa de Etiopía;[5][8] además, se ha dado históricamente a los patriarcas de la Iglesia católica armenia y la Iglesia católica caldea.[1] Los primados de la Iglesia asiria del Oriente y la Antigua Iglesia del Oriente son considerados por ellas el patriarca-catolicós de la Iglesia del Oriente. Por su parte, en India, el obispo metropolitano de la Iglesia ortodoxa de Malankara y el mafrián de la Iglesia ortodoxa siríaca llevan el título de catolicós del Oriente;[4][9][10] así mismo, el arzobispo mayor de Trivandrum usa el título de catolicós en la Iglesia católica siro-malankar.[7]
El término 'catolicós' viene del griego antiguo καθ' ὅλου (kath'olou, "generalmente") de κατά (kata, "abajo") y ὅλος (holos, "total"), que significa "concerniente al total, universal, general". Se ha discutido si originalmente designaba a los ministros imperiales que ejercían el cargo de procurador general,[11] un oficio financiero o civil en el Imperio romano.[12]
El primer uso eclesiástico del título lo hizo el obispo principal de la Iglesia apostólica armenia, en el siglo IV,[12] quien originalmente era sufragáneo de la sede de Cesarea en Capadocia.[13] Algún tiempo después fue adoptado por los obispos de Seleucia-Ctesifonte en Persia, quienes se convirtieron en los primados de la Iglesia del Oriente. La primera afirmación de que el obispo de Selucia-Ctesifonte era superior a los otros obispados y tenía derechos patriarcales (usando un término posterior) fue hecha por el obispo metropolitano Papa bar Gaggai (o Aggai, c. 280-328), a quien un concilio en 315 concedió el título de catolicós del Oriente;[11] en el siglo V esta afirmación se fortaleció y el metropolitano Isaac (o Ishaq, 399-c. 410), que presidió el Concilio de Seleucia-Ctesifonte, usó el título de obispo de Selucia-Ctesifonte, catolicós y cabeza de los obispos de todo el Oriente.[14] Esta línea de catolicós se dividió varias veces desde mediados del siglo XVI y de ella surgieron los de la Iglesia católica caldea, la Iglesia asiria del Oriente y la Antigua Iglesia del Oriente.
A principios del siglo IV Albania caucásica y el Reino de Iberia (Georgia) se convirtieron al cristianismo y el primado de cada uno de esos países asumió el título de catolicós, aunque ninguno de ellos era autocéfalo, sino que estaban sujetos a los catolicós armenios, quienes luego rechazaron el Concilio de Calcedonia. A finales del siglo VI o principios del VII, los catolicós georgianos afirmaron su independencia y aceptaron la ortodoxia bizantina; en adelante, la Iglesia ortodoxa georgiana experimentó las mismas evoluciones que la griega. En 1783, Georgia se vio obligada a abolir el oficio de sus catolicós y colocarse bajo el Santísimo Sínodo Gobernante de la Iglesia ortodoxa de Rusia, país al que se unió políticamente en 1801. Los catolicós albaneses permanecieron unidos a la Iglesia armenia, con la excepción de un breve cisma hacia finales del siglo VI. Poco tiempo después, Albania fue asimilada en parte con Armenia y en parte con Georgia. No se menciona ningún catolicós en Albania después del siglo VII.[13]
En la Iglesia católica, este título tradicional oriental fue reconocido en 1957 por el papa Pío XII.[15] Los catolicosados de Iglesias reconocidas con el título patriarcal también son llamados "patriarcados menores",[6] pues aunque son iguales en dignidad, tienen un lugar detrás de las antiguas sedes patriarcales de Constantinopla, Alejandría, Antioquía y Jerusalén en la precedencia de honor.[16] Por otra parte, de acuerdo con la tradición siro-antioquena, el título de arzobispo mayor equivale al de catolicós, pues este ejerce su potestad junto con el Santo Sínodo en el catolicosado.[7]