Los Erotes (Ἔρωτες / Érōtes) eran dioses alados del amor en la mitología griega. Estas deidades eran los compañeros del dios Eros y se dedicaban a las gráciles tareas complementarias al amor. Según unos mitos, eran los hijos de Afrodita; según otros, formaban parte de su séquito. Son el equivalente a los Cupidos o Amoretti de la mitología romana. El término colectivo «ἔρωτες («erotes») es simplemente el plural de «ἔρως» («eros»): "deseo».
El poeta griego Hesíodo originalmente solo describe como erotes a Eros (dios del amor) y a Hímero (dios del deseo sexual), que estuvieron presentes en el nacimiento de Afrodita. Más tarde añadió a Potos, formando una triada. Posteriormente aparecieron el resto de erotes.
Eros (Ἔρως / Érōs: «deseo») era el dios original del amor y uno de los cuatro dioses primordiales, hijo de Afrodita y Ares. De acuerdo con la tradición iniciada por Eratóstenes, Eros era principalmente el protector del amor entre hombres, mientras Afrodita presidía sobre el amor de los hombres por las mujeres. Debido esto, Eros se asoció con el atletismo (reservado a los hombres), erigiendo estatuas en los gimnasios, más concretamente en las palestras, uno de los principales lugares de reunión de los hombres con sus amados. Era representado a menudo llevando una lira, o un arco con flechas. También se lo representaba acompañado de delfines, flautas, gallos, rosas y antorchas.
Anteros (Ἀντέρως / Antérōs) era el dios del amor correspondido y vengador del amor sin correspondencia. Era hijo de Afrodita y Ares, por tanto, hermano de Eros. Originalmente Anteros se opuso a Eros y luchó contra él, conflicto que también se concibe como la rivalidad existente entre dos amantes. Anteros castigaba a los que desdeñaban y no correspondían al amor de otros, por lo que es el vengador o deus ultor de Cupido. Anteros se le suele representar como un hermoso joven de larga cabellera, similar a Eros en todos los sentidos, aunque a veces con alas de mariposa, y arco con flechas.
Hímero (Ἵμερος / Hímeros: «deseo incontrolable») era el dios del deseo sexual y del amor no correspondido, hijo de Afrodita y Ares. Al igual que sus hermanos, se lo representa con un arco con flechas, y además solía llevar una taenia, una diadema de colores usada por los atletas.
Himen (Ὑμήν) o Himeneo (Ὑμεναιος) era el dios de las ceremonias del matrimonio. Era hijo de Afrodita y Dioniso, pero otras historias le dan un origen legendario. En uno de los fragmentos conservados del Catálogo de mujeres, atribuido a Hesíodo, se dice que Magnes «tuvo un hijo de extraordinaria belleza; Himeneo. Y cuando Apolo vio al muchacho, se enamoró de él y no abandonó la casa de Magnes». Al menos desde el Renacimiento italiano, Himeneo era generalmente representado en el arte como un hombre joven llevando una guirnalda de flores y sosteniendo una antorcha encendida en una mano.
Hedílogos (Ἡδυλόγος / Hēdylógos) era el dios del engatusamiento y la adulación. No se menciona en texto alguno, sino que se representa en las antiguas pinturas de cerámica griega.
Hermafrodito (Ἑρμαφρόδιτος) era el dios del matrimonio heterosexual, hijo de Hermes y Afrodita (de los cuales recibió su nombre). Según el poeta Ovidio, Hermafrodito nació siendo un niño muy hermoso, del que la ninfa Salmacis se enamoró y rogó estar unidos para siempre. Los dioses fusionaron sus dos cuerpos en uno solo, transformándolo en una forma andrógina con atributos femeninos y masculinos, es decir, intersexual. El mito representa la unión inseparable entre hombre y mujer, personificado en Hermafrodita.
Peito, diosa de la seducción y el cortejo, hija de Afrodita y Hermes.
Potos (Πόθος / Póthos: «anhelo») era el dios del deseo, el anhelo o la nostalgia amorosa. En algunas versiones del mito, Poto es el hijo de Afrodita. En el templo de Afrodita en Mégara, había una escultura representando a Potos junto con Eros e Hímero. Se lo representaba llevando una vid, lo que indica una conexión con el vino o el dios Dioniso. Potos es el nombre de la flor blanca Asphodelus albus, que se utilizaba en los funerales de la Antigua Grecia.