Roald Dahl | ||
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Información personal | ||
Nacimiento |
13 de septiembre de 1916 Llandaff (Cardiff, Reino Unido) | |
Fallecimiento |
23 de noviembre de 1990 Oxford, Inglaterra, Reino Unido | (74 años)|
Causa de muerte | Leucemia | |
Sepultura | Great Missenden | |
Residencia | Llandaff | |
Nacionalidad | Británica y noruega | |
Lengua materna | Noruego | |
Familia | ||
Padres |
Harald Dahl Sofie Magdalene Hesselberg | |
Cónyuge |
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Hijos | Ophelia Dahl | |
Educación | ||
Educado en |
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Información profesional | ||
Ocupación | Guionista, novelista, autobiógrafo, poeta, escritor de cuentos, escritor de literatura infantil, escritor y piloto de caza | |
Años activo | desde 1942 | |
Géneros | Literatura de terror, misticismo, fantasía y literatura infantil | |
Obras notables | Danny el campeón del mundo | |
Rama militar | Real Fuerza Aérea británica | |
Rango militar |
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Conflictos | Segunda Guerra Mundial | |
Sitio web | ||
Distinciones |
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Roald Dahl (Llandaff, 13 de septiembre de 1916-Oxford, 23 de noviembre de 1990) fue un novelista, cuentista, poeta y guionista británico de ascendencia noruega. Entre sus obras más populares se encuentran Charlie y la fábrica de chocolate, James y el melocotón gigante, Matilda, El gran gigante bonachón, Agu Trot, Las brujas y Relatos de lo inesperado.
Roald Dahl nació en el barrio de Llandaff de la ciudad de Cardiff, Gales, el 13 de septiembre de 1916.[1] El padre de Dahl, Harald Dahl (1863-1920), era un acaudalado agente marítimo que había emigrado al Reino Unido desde Sarpsborg, Noruega.[2] Se había afincado en Cardiff en la década de 1880 con su primera mujer, la francesa Marie Beaurin-Gresser, y hecho fortuna. Los Dahl tuvieron dos hijos juntos (Ellen Marguerite y Louis) antes del fallecimiento de Marie en 1907. La madre de Roald Dahl, Sofie Magdalene Hesselberg (1885-1967), también de origen noruego, emigró al Reino Unido y se casó con Harald en 1911.[2]
Roald fue el cuarto de los cinco hijos que tuvieron Harald y Sofie; sus padres le pusieron el nombre de Roald en honor al explorador Roald Amundsen, un héroe nacional de Noruega. La lengua materna de Roald fue el noruego, que hablaba en casa con sus padres y sus hermanas Astri, Alfhild, Else y Asta; los Dahl bautizaron a Roald en la fe luterana de la Iglesia de Noruega.[3]
Cuando Roald tenía tres años, su hermana Astrid murió de apendicitis y unas semanas después falleció su padre Harald a los cincuenta y siete años, víctima de una neumonía. En el momento de su fallecimiento, Harald Dahl contaba con una fortuna valorada en £158,917 10s. 0d. (equivalente a £6,791,035 en 2021).[4] A pesar de su viudez, su madre prefirió mantener a la familia en Gales en lugar de retornar a Noruega a vivir con sus parientes, para cumplir el deseo de su marido de que sus hijos fueran educados en escuelas británicas.[5]
Roald asistió a la escuela de la catedral de Llandaff. A los ocho años, Roald y cuatro de sus amigos fueron azotados por el director después de poner un ratón muerto en un tarro de dulces (concretamente, de inflamofletes) en una tienda del barrio, castigo que su madre consideró desmedido, retirándolo de la escuela. Cuando tenía nueve años, fue enviado a St. Peter's School, un colegio privado en la ciudad costera de Weston-super-Mare, a la que asistió desde 1923 hasta 1929. Desde los trece años, fue educado en Repton School, en Derbyshire, donde fue ayudante del prefecto, se convirtió en capitán del equipo escolar de fives y desarrolló su interés por la fotografía. Durante sus años en Repton, Cadbury, una fábrica de chocolates, enviaba ocasionalmente cajas de sus nuevos productos a la escuela para que fueran probados por los alumnos. Dahl solía soñar con inventar una nueva barra de chocolate que sería el asombro del mismo señor Cadbury, lo que le sirvió como inspiración para escribir su segundo libro para niños, Charlie y la fábrica de chocolate.
A lo largo de su infancia y adolescencia, pasaba sus vacaciones de verano en Noruega. Su niñez es el tema de su libro Boy (relatos de infancia), en el que insiste que dicho libro no es su autobiografía, ya que insiste que nunca se le ocurriría escribir una autobiografía. Roald dice que Boy son unas historias y recuerdos de una infancia colmada de diversión.
Cuando terminó el colegio, pasó tres semanas explorando Terranova con el Public Schools Exploring Society. En julio de 1934 empezó a trabajar en la empresa petrolífera Royal Dutch Shell. Tras dos años de formación en el Reino Unido, fue enviado a Dar-es-Salaam, Tanganica (actual Tanzania). Junto con los otros dos únicos empleados de Shell en todo el territorio, vivió lujosamente en la Shell House, en las afueras de Dar-es-Salaam, con un cocinero y ayudantes personales. Suministrando combustible en Tanganica, se enfrentó a hormigas y leones, entre otros peligros.
En noviembre de 1939 se unió a la Royal Air Force. Después de un viaje en coche de casi mil kilómetros desde Dar-es-Salaam hasta Nairobi, fue aceptado para el entrenamiento de vuelo junto con otros dieciséis candidatos, trece de los cuales morirían en combate aéreo más tarde. Con siete horas y cuarenta minutos de experiencia en su De Havilland Tiger Moth, comenzó a volar solo y apreció la vida silvestre de Kenia durante sus vuelos. Continuó con el entrenamiento avanzado en Habbaniya (ochenta kilómetros al oeste de Bagdad, Irak). Tras seis meses volando Hawker Harts, fue nombrado oficial y asignado al escuadrón número 80 de la RAF, volando obsoletos Gloster Gladiator. Dahl se sorprendió al descubrir que no sería entrenado en combate aéreo ni en cómo volar los Gloster Gladiators.
El 19 de septiembre de 1940, Dahl volaría su Gladiator desde Abu Suwiur, en Egipto, hasta Amiriya para recargar combustible y luego hasta Fouka, Libia, por una segunda carga. Desde ahí volaría a la pista del escuadrón 80, cincuenta kilómetros al sur de Mersah Matruh. En el tramo final, no pudo encontrar la pista y, corto de combustible y con la noche cayendo, se vio forzado a intentar un aterrizaje en el desierto. Desafortunadamente, el tren de aterrizaje golpeó una roca y el avión se estrelló. Roald se fracturó el cráneo, se rompió la nariz y perdió la visión. Logró arrastrarse lejos del avión en llamas y se desmayó. Más tarde, escribió acerca del accidente en su primer trabajo publicado. En una investigación de la Royal Air Force acerca del suceso, se descubrió que la ubicación a la que se le había ordenado volar era completamente incorrecta, habiendo sido enviado a una zona entre las fuerzas británicas e italianas.
Dahl fue rescatado y llevado a un puesto de primeros auxilios en Mersah Matruh, donde recuperó la conciencia (aunque no la vista) y fue trasladado en tren al hospital de la Royal Navy en Alejandría. Allí se enamoró de una enfermera, Mary Welland, que fue la primera persona que vio al recuperar la vista, tras ocho semanas de ceguera. Los doctores dijeron que no había ninguna posibilidad de que volviese a volar, pero en febrero de 1941, cinco meses después de ingresar al hospital, fue dado de alta y pasado a tareas de vuelo. En esos momentos, el escuadrón número 80 se encontraba en Elevsis, cerca de Atenas, Grecia, combatiendo junto con la British Expeditionary Force contra las fuerzas del Eje, sin esperanzas de derrotarlos. En abril de 1941, atravesó el mar Mediterráneo en un Hawker Hurricane para finalmente unirse a su escuadrón en Grecia.
Allí conoció a un cabo que preguntaba cuánto tiempo sobreviviría el nuevo avión, acompañado solo por catorce Hurricanes y cuatro Bristol Blenheims en toda Grecia contra miles de aviones enemigos. El líder del escuadrón tampoco se mostraba entusiasmado por tener solo un nuevo piloto. De todos modos, Dahl se hizo amigo de David Coke, quien, si no hubiese muerto más tarde en combate, se habría convertido en earl de Leicester.
Dahl tuvo su primera acción sobre Calcis, donde Junkers Ju 88s se encontraban bombardeando barcos. Solo con su Hurricane contra seis bombarderos, logró derribar uno. Escribió sobre todos estos incidentes en su libro autobiográfico Volando solo.
Comenzó a escribir en 1942, cuando fue trasladado a Washington, como agregado aéreo adjunto. Su primer trabajo publicado, aparecido en la edición del Saturday Evening Post el 1 de agosto de 1942, fue un cuento titulado «Pan comido», describiendo su accidente con el Gloster Gladiator. El título original en inglés era «A piece of cake», pero fue cambiado a «Shot down over Libya» («Derribado sobre Libia»).
Estuvo casado durante treinta años (desde 1953 hasta 1983) con la actriz estadounidense Patricia Neal. Tuvieron cinco hijos (incluyendo a la autora Tessa Dahl), uno de los cuales, Olivia Twenty Dahl, falleció de encefalitis por el virus de sarampión a la edad de siete años, en 1962. Theo, su único hijo varón, sufrió un accidente durante su infancia que le provocó hidrocefalia. Como resultado, su padre se involucró en el desarrollo de lo que más tarde se conocería como válvula de Wade-Dahl-Till, un dispositivo para aliviar esta condición.[6] Su hija Ophelia Dahl es directora y cofundadora (junto con el doctor Paul Farmer) de Partners in Health, una organización sin fines de lucro dedicada a proveer cuidados médicos a algunas de las más empobrecidas comunidades del mundo. La hija de Tessa, e inspiración para un personaje de El gran gigante bonachón, es la modelo y autora Sophie Dahl. En 1983, se casó con Felicity Ann d'Abreu Crosland, la mejor amiga de su primera esposa.
Murió de leucemia el 23 de noviembre de 1990 en su casa, Gipsy House, en Great Missenden, Buckinghamshire, a los 74 años, y fue enterrado en el cementerio de la parroquia de San Pedro y San Pablo. En su honor, la Roald Dahl Children's Gallery fue inaugurada en el Bucks County Museum, en la cercana Aylesbury. Los compromisos solidarios de Dahl en los campos de la neurología, la hematología y la alfabetización han sido continuados tras su muerte a través de la Roald Dahl Foundation. En junio de 2005, el Roald Dahl Museum and Story Centre fue inaugurado en Great Missenden para celebrar el trabajo de Dahl.
Impulsado por Cecil Scott Forester, Dahl escribió su primer trabajo publicado, Pan comido, que fue comprado por el Saturday Evening Post.
Su primer libro para niños fue Los gremlins, que trataba de unas pequeñas criaturas malvadas que formaban parte del folclore de la Royal Air Force. Fue publicado en 1943. El libro había sido encargado por Walt Disney para un largometraje animado que nunca lo llegó a realizar. Dahl continuó creando algunas de las historias para niños más conocidas del siglo XX, tales como Charlie y la fábrica de chocolate, Matilda, James y el melocotón gigante, Los Cretinos o Boy (relatos de infancia), donde cuenta su infancia.
Paralelamente, tuvo una exitosa carrera como escritor de macabros cuentos para adultos, usualmente apelando al humor negro y a los finales sorpresivos. Muchos de ellos fueron originalmente escritos para revistas estadounidenses tales como Ladies Home Journal, Harper's, Playboy y The New Yorker, y luego recogidos en antologías, ganando la aclamación mundial para el autor. Dahl escribió más de sesenta cuentos y han aparecido en numerosas colecciones, algunas solo publicadas en forma de libro después de su muerte.
Uno de sus cuentos para adultos más famosos, Hombre del Sur (The smoker o Man from the South), fue filmado como un episodio de Alfred Hitchcock Presenta y fue adaptada en el segmento de Quentin Tarantino de la película de 1995 Four Rooms. Su colección de cuentos Relatos de lo inesperado fue adaptada para una exitosa serie de televisión del mismo nombre. Algunos de sus cuentos son supuestamente extractos del diario de su (ficticio) tío Oswald, un caballero rico cuyas hazañas son el tema de estas historias.
Por un breve período en los años 60, Dahl escribió guiones para obtener dinero. Dos de ellos, las películas de James Bond, Sólo se vive dos veces (You only live twice) y Chitty Chitty Bang Bang, fueron adaptaciones de novelas de Ian Fleming. Además, adaptó su propio trabajo para realizar Willy Wonka y la fábrica de chocolate, de 1971.
Sus libros han vendido más de 250 millones de copias en el mundo.[7]
Muchas de sus obras infantiles tienen ilustraciones de Quentin Blake.
En el verano de 1983, Dahl escribió una crítica para el Literary Review de God cried, un libro ilustrado sobre la Guerra del Líbano de 1982 del escritor del Newsweek Tony Clifton. Según Clifton, durante la guerra los israelíes mataron a miles de civiles beirutíes al bombardear escuelas, hospitales y bloques de apartamentos indiscriminadamente. La crítica de Dahl sentenciaba que durante esta invasión fue cuando «todos empezamos a odiar a Israel» y que el libro haría a los lectores «violentamente anti-israelíes». Según el biógrafo Jeremy Treglown, Dahl había escrito en un principio «cuando todos empezamos a odiar a los judíos», pero el editor de Literary Review Gillian Greenwood cambió entonces el término de Dahl «judíos» a «israelíes».[8] Dahl insistiría posteriormente diciendo «No soy antisemita. Soy anti-Israel».[8]
Dahl contó a un periodista en 1983 que «hay un rasgo en el carácter judío que provoca aversión... Quiero decir que siempre hay una razón por la cual lo anti-algo crece en cualquier sitio; incluso un apestoso como Hitler no los escogió a ellos sin razón.»[8][1] No obstante, según Treglown, Dahl mantenía amistad con un puñado de individuos judíos. El filósofo judío Isaiah Berlin, que estuvo en el ejército junto a Dahl en Washington durante la Segunda Guerra Mundial,[9] dijo: «pienso que pudo decir cualquier cosa. Pudo haber sido pro-árabe o pro-judío. No hay ni una sola línea consistente. Era un hombre que se guiaba por caprichos, lo que quiere decir que arremetería en cualquier dirección, por decirlo de alguna manera».[8]
Años después, Dahl incluyó un compasivo episodio acerca de refugiados germano-judíos en su libro Volando solo y en otra ocasión dijo que se oponía a la injusticia, no a los judíos.[10] Creía que los medios de comunicación habían suprimido detalles sobre las acciones militares israelíes tales como la matanza de civiles, y mantenía su firme postura política contra Israel, diciendo en el periódico británico The Independent poco antes de morir en 1990: «Desde luego que soy anti-israelí y me he vuelto antisemita de la misma manera en que un judío en Inglaterra podría fervientemente defender el sionismo. Creo que deberían ver ambas caras. Es el tema de siempre: sabemos sobre los judíos y el resto del asunto. No hay editores no-judíos en ningún lado, controlan los medios de comunicación —lo cual resulta muy inteligente— y es por eso por lo que el presidente de los Estados Unidos tiene que vender todos esos bártulos militares a Israel».[11]
Cuando en 1990 su libro Las brujas fue llevado a la pantalla grande por Jim Henson, quien delegó la dirección a Nicolas Roeg, Dahl se enfureció porque Roeg cambió el final original en el guion y suavizó muchas escenas al ver que no eran del agrado de su hijo. Como gesto de conciliación, Roeg ofreció filmar dos versiones antes de tomar su decisión final: la versión fiel a los eventos del libro donde Luke sigue siendo un ratón y la versión más feliz donde se transforma de nuevo en un humano. Al ver la escena fiel a su libro, Dahl se conmovió tanto que lloró.
Sin embargo, Roeg nunca mostró intención de utilizar el final fiel a la obra y utilizó el final cambiado, lo que llevó a Dahl a exigir que su nombre fuera eliminado por completo de los créditos y a amenazar con una campaña publicitaria contra la película por la cual incluso se dice que fue visto fuera de los cines con un megáfono desacreditando la película e intentando convencer a la gente que no la viera.[12] Solo fue disuadido de esto a instancias de Jim Henson.[13] Aun así, tras esta decepción, en retribución Dahl prohibió terminantemente que sus obras fueran nuevamente llevadas al cine durante el resto de su vida.
El 17 de febrero de 2023 el diario inglés Telegraph anunció que cientos de palabras habían sido cambiadas para la más moderna edición de las obras completas del autor por parte de su editorial Puffin, del Grupo Penguin[14]. Se denunciaba en ese artículo que "muchas palabras relacionadas al peso, a la salud mental, a la violencia, o al género y la raza se han recortado y reescrito".
Ver la Lista de cuentos de Roald Dahl.
Roald Dahl fue también presentador de los programas Way out y Tales of the unexpected (en la primera temporada).